Tres personas vestidas como policías redujeron a una familia en su casa, maniataron a las víctimas y escaparon con una importante suma de dinero. El caso es investigado por la Comisaría 26ª y personal del CGI.
Una familia de Villa Gobernador Gálvez vivió momentos de tensión durante la mañana del lunes, cuando fue víctima de una entradera por parte de tres delincuentes armados que simularon ser policías. La investigación está en curso. Según fuentes policiales, el hecho ocurrió alrededor de las 7:40, del lunes, en una vivienda ubicada en calle Pablo VI al 900. Un hombre de 38 años relató que fue sorprendido junto a su familia por dos hombres y una mujer que ingresaron al domicilio vestidos con prendas similares a las policiales, simulando un allanamiento.
Los delincuentes, armados, amenazaron de muerte a los presentes, maniataron al grupo familiar con precintos y cintas, y sustrajeron una suma cercana a 3 millones de pesos y 1.000 dólares. Tras escapar en un vehículo Ford Focus negro con vidrios polarizados, la víctima logró soltarse y salió a perseguirlos con su auto particular por la autopista Rosario-Buenos Aires, hasta que colisionó con el vehículo en varias oportunidades.
Posteriormente, la policía acompañó a la víctima a su casa, donde se verificó que su pareja y una menor estaban en buen estado. Más tarde, mediante GPS, localizaron uno de los celulares robados en una distribuidora de zona sur, donde fue secuestrado. En otro procedimiento, un Toyota Etios abandonado en la autopista fue requisado: en su interior se hallaron $301.600 y lo que sería una punta de bala.
La causa, bajo jurisdicción de la Comisaría 26ª y el área de investigaciones correspondientes, continúa su curso con las pruebas reunidas. Afortunadamente, no se registraron heridos. Las autoridades trabajan para identificar a los responsables del violento episodio.

Horas más tarde en la misma zona, fue denunciado en la Comisaría 26º un hecho de violencia de género, dado que un hombre alcoholizado habría agredido a su ex pareja. Fue detenido y lo trasladaron a la seccional policial, para luego quedar a disposición de la justicia