Se dice que "hay que ver el vaso medio lleno" o que "de las malas experiencias algo bueno tenemos que llevarnos" y en este caso ambas son valederas. En la noche de este sábado un repartidor de Rappi sufrió un asalto cuando llevaba un pedido con su bicicleta en Pellegrini y Ayacucho de Rosario, al llegar a destino lo abordaron ladrones que se llevaron el medio de transporte, la bici, y hasta aquí bien podría ser un hecho más de los tantos que suceden a menudo, pero no, esta historia tiene final feliz.
La mujer que había realizado el pedido mediante la aplicación telefónica tuvo la generosidad y solidaridad para con el joven repartidor y le obsequió su bicicleta para que pudiera continuar con su trabajo.
Comentarios
¡Sin comentarios aún!
Se el primero en comentar este artículo.
Deja tu comentario